El Tribunal Supremo Federal de Brasil (STF) decidió el miércoles que juzgará otra vez algunos de los delitos por los que 12 procesados fueron condenados en la primera etapa del juicio del caso mensalão, uno de los mayores escándalos políticos de Brasil. La decisión llega nueve meses después de que la mayor instancia judicial condenase a 25 personas por su implicación en el caso, un esquema corrupto de compra de votos en el Congreso, asociado al Partido de los Trabajadores, ahora en el poder.
Se revisarán los casos más controvertidos, en los que los procesados contaron con al menos cuatro votos a su favor en la primera fase del proceso, que se concluyó en diciembre. Si tienen éxito, algunos de los condenados, como el exministro José Dirceu, se librarán de cumplir su sentencia en en una prisión.
La cuestión dividió al Supremo y se decidió por 6 votos a 5. El ministro Celso de Mello, el más antiguo de los integrantes de la corte, fue quien desempató el marcador, opinando a favor de los llamados “embargos infringentes”, recursos jurídicos que serán usados por los condenados para que el STF analice de nuevo sus casos.
La revisión de los embargos solo será el año que viene, tras la publicación de un acuerdo que resumirá las decisiones tomadas sobre los primeros recursos de los condenados durante el juicio, casi todos rechazados. El ministro Luiz Fux fue elegido como el relator que conducirá el análisis del nuevo proceso.