Una vaguada atlántica cargada de aire frío llegará este fin de semana a la Península y provocará un descenso promedio de 8 grados en los termómetros, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet), que precisa que esta acusada bajada de las temperaturas no afectará al litoral mediterráneo.
Al igual que en topografía, una vaguada meteorológica consiste en una zona o masa de aire en la atmósfera que se sitúa a menor altitud en una línea de sistemas nubosos inestables, ha explicado la Aemet a EL PAÍS. “En agosto es normal que pase”, precisan las mismas fuentes.
La vaguada va precedida por tormentas y precipitaciones que serán especialmente fuertes en los pirineos occidentales, aunque tampoco se descartan en el resto del centro y norte peninsular. Después, llegará una masa de aire más fresco.
El sábado predominará el viento de componente sur en el interior peninsular, y el domingo rolará al oeste. En Canarias estará nuboso en el norte de las islas, y poco nuboso en el sur, con viento del noreste, con intervalos de fuerte en las islas occidentales.
La última semana de agosto, que coincide con el final del periodo vacacional, desde el lunes 24 al domingo 30, se espera tiempo estable y sin precipitaciones en la mayor parte de España, con temperaturas en ascenso en la mayor parte de la Península. El lunes todavía se producirán lluvias débiles en Galicia y probablemente en Pirineos, pero tenderán a cesar a lo largo del día, predominando los cielos poco nubosos o despejados en la Península y Baleares hasta el viernes 28. La Aemet no descarta que prevalezcan las inestabilidades en el Cantábrico y el cuadrante noreste peninsular, con posibles precipitaciones, más probables en el noroeste gallego.